Perteneciendo al distrito Casco Antiguo sirve de divisoria entre dos barrios, la plaza se encuentra dentro del
barrio del Arenal, estando las manzanas de sus lados norte y este (ayuntamiento) dentro del
barrio de la Alfalfa.
Convergen en ella las calles Tetuán, Jaén y Méndez Núñez por el norte; Bilbao y Madrid por el oeste; Badajoz, Barcelona y Joaquín Guichot por el sur; Granada y la avenida de la Constitución por el este.
Conocida como "laguna de la Pajería", era un humeral en la Edad Media, cuyas aguas, de un brazo del río Guadalquivir, procedían de la calle Sierpes y tenían salida por la avenida de la Constitución.
Tras su desecación se convertiría en un cementerio, y en
el siglo XIII se afincarían en este terreno los frailes franciscanos, quienes por
sucesivas ampliaciones acabarían construyendo una casa conventual de enormes
dimensiones, mucho mayor al actual perímetro de la plaza.
Tras la
guerra napoleónica de 1808 el edificio del convento quedó muy dañado,
sufriendo además en 1810 un incendio que lo terminó de arruinar, hasta el
punto que se acondicionó parte de la zona como plaza.
Fachada del Ayuntamiento a la Plaza Nueva, obra de segunda mitad del s. XIX.
El Ayuntamiento de Sevilla se comienza a construir
en 1526 siguiendo las trazas de Diego de Riaño en estilo renacentista-plateresco, del que constituye un magnífico ejemplo. Su
fachada principal se abre a la antigua Plaza Mayor, ante el desaparecido
convento de San Francisco, al cual se accedía a través del Arquillo, que
comunicaba con su compás.
En 1852
se encarga al arquitecto municipal Balbino Marrón y Ranero la
realización de una ampliación del Ayuntamiento con fachada a esta plaza,
culminada en 1867 y en estilo Neoclásico.
Desde 1873, con la I República, la plaza pasó a llamarse
"República" y "República Federal".
Con la Restauración en 1875, el Ayuntamiento la denominó "de San
Fernando".
Es esta una obra de estilo neobarroco, su diseño se debe al arquitecto de origen levantino y afincado en Sevilla Vicente Traver Tomás, quien lo diseña en el año 1917 para su promotor, don
Miguel García de Longoria; quedando finalmente acabado en 1920.
Es una espléndida obra cuya fachada a la plaza se dispone
con perfecta simetría, realizada toda ella en ladrillo de color claro, donde
incluye finos detalles en azulejo azul.
Situada en una de las esquinas de la Plaza Nueva, en una
ubicación excepcional, abierta hacia la Avenida de la Constitución, el edificio surge a partir del año 1926 cuando es
encargado por la Compañía para establecer allí su central en Sevilla.
En 1931 la II República la bautiza como "Plaza
Nueva". En 1936 vuelve a ser de "San Fernando", pero
nunca se cambiaron las placas. Finalmente la democracia le puso oficialmente el
nombre por el que siempre había sido conocida: "Plaza Nueva".
Fachada del Banco a la Plaza Nueva.
El edificio del Banco de Bilbao de Sevilla se levanta en
una de sus esquinas.
Data de 1950 y responde a la corriente racionalista
clasicista propia de esta época, que se lleva a cabo especialmente en la
arquitectura asociada a los edificios corporativos de las grandes entidades,
tanto públicas como privadas.
Este edificio, conocido por el nombre de esta marca
comercial, está situado en la esquina de la calle Méndez Núñez con la de
Bilbao, y asoma a la plaza; es obra de Alfonso Toro Buiza de 1960.
Rocío Romero Jiménez
Apolonia Díaz Jiménez